lunes

Amanecidos.

Lo que puedas o no puedas decirme,
lo que quieras o no quieras contarme,
si esta mal o esta bien lo que hiciste,
si la sangre en el cuchillo es por herirme,
o solo yo me deje tajear, tan vulnerable,
tan predecible, tan eficaz,
dando vida, no das mas, y te quedas,
y te excusas, y haces brillar,
maravillar, cada argumento, de tu paladar.

Somos los amanecidos,
el principio es lo mejor,
y lo mejor esta por llegar,
aunque no puedas verlo ni contarlo,
puede hacer de vocero,
y sin escrúpulos, aullarlo,
no somos pordioseros,
tampoco estrafalarios,
somos la secuelas de tu ley,
y los soldados de lo correcto
no hay temor que satisfaga,
a tu lobito sediento.

Comprender, nadie quiere comprender,
cuando la verdad rompe nuestras narices,
y no nos parece doler,
aunque roce nuestros labios,
aunque se plasme en un papel,
perecer, perecer, perecer.

Este es un mensaje, que pocos saben leer,
acusados de miserables, desde el infierno, hasta el eden.
Somos el cáncer del mundo, y en nuestra rabia,
nos veras, solo queda desaparecer,
son cuentos chinos, son historias de té.
Dejemos que el olvido hable,
seamos lo que debamos ser.















El horizonte es enorme, cuando crees.

domingo

No te entregues, por favor.

Un fogón de sensaciones.































LA PUCHA!
(Gerardo (L))